Maduro impulsa jornadas de alistamiento militar en medio de la tensión con EE. UU.

Cientos de ciudadanos han manifestado su intención de unirse a las milicias en Venezuela. Uno de los puntos principales de convocatoria es el Cuartel de la Montaña, en Caracas. La tensión en la región ha crecido tras el despliegue de buques de guerra de Estados Unidos en el Caribe, cerca de las costas venezolanas, como parte de sus operaciones contra el narcotráfico. Frente a esto, Nicolás Maduro ordenó nuevas jornadas de alistamiento de milicianos para el viernes 29 y sábado 30 de agosto, con el fin de “completar” el registro que ya había iniciado el fin de semana pasado, al que calificó como una respuesta a las “amenazas” de Washington.

En los últimos días, decenas de personas se han acercado a los puntos de inscripción para sumarse a la llamada Milicia Bolivariana, un cuerpo civil adscrito a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, que según sus críticos tiene un fuerte componente ideológico. Para el gobierno, se trata de una demostración de fuerza y de preparación ante lo que consideran un posible intento de agresión extranjera, especialmente tras la presencia de tres destructores estadounidenses frente a sus costas.

Los centros de inscripción fueron habilitados en plazas, edificios públicos, instalaciones militares y en el propio Palacio de Miraflores. También en el Cuartel de la Montaña, donde descansan los restos del expresidente Hugo Chávez. Allí, voluntarios de todas las edades se registran, algunos exmilitares y policías en retiro, mientras otros civiles muestran disposición a “defender la patria”. Tras el registro, los asistentes reciben charlas, ven documentales históricos sobre conflictos pasados y tienen acceso a exhibiciones de armamento militar.

Durante el proceso, se escucharon arengas como “¡Me alisto por Venezuela, viva la patria!”, pronunciadas por los nuevos reclutas. La estrategia, anunciada como parte del llamado Plan Nacional de Soberanía y Paz, busca reforzar el bloque de defensa nacional en medio del aumento de la presión internacional. Desde Estados Unidos, la Casa Blanca advirtió recientemente que está lista para usar “todo su poder” en la lucha contra el narcotráfico, lo que incluye el despliegue de buques y tropas en aguas cercanas a Venezuela.

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